viernes, 25 de septiembre de 2009

granjero y gallina

Un granjero tenía una gallina extraordinaria: todos los días ponía un huevo de oro.
Durante un tiempo el granjero se sintió feliz con aquella rara fortuna, pero un día pensó que no tenía porqué esperar tanto para hacerse con un tesoro verdadero, y decidió matarla para apoderarse de una vez por todas del oro.
¿Y qué sucedió? Pues que al abrirla, halló que por dentro su gallina maravillosa era igual a cualquier otra. No había en su interior ningún tesoro.
Pero ahora, muerta la gallina ya no tendría siquiera el "huevito" de oro que todos los días le ofrecía.
El ambicioso que quiere enriquecerse de la noche a la mañana, suele encontrar su castigo perdiendo los bienes que posee.


No sé porqué, cuando el presidente del gobierno del reino de los 17,4 taifas, antigua España, dijo que nadie se quedaría en la cuneta, nadie le recordó que no muchos meses atrás había dicho que eramos los campeones de la economía del mundo, que habíamos marcado muchos goles y muy pocos lo que habíamos encajado, tampoco sé sabe porqué, nadie le recordó que el 26 de mayo 2005, es decir un año ya desgobernando España, el "Financial Times" publicó: El 'boom' inmobiliario español, un enigma que preocupa a Europa.

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